Seyyed Jafar Aghaee, encargado de negocios de la Embajada de la República Islámica de Irán en Azerbaiyán, dio la bienvenida al jefe de Estado.
El presidente de Azerbaiyán firmó un libro de condolencias.
A continuación, hablando con el encargado de negocios de la Embajada, el presidente Ilham Aliyev resaltó:
- La trágica muerte del presidente de la República Islámica de Irán, Sr. Seyyed Ebrahim Raisi, nos ha conmocionado profundamente a todos. El ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian, y otras personas murieron trágicamente con él. Que Alá haga descansar sus almas en paz. Expreso mis condolencias al pueblo de Irán. Se trata de una gran pérdida. Es una pérdida no sólo para el pueblo y el Estado de Irán, sino también para todo el mundo musulmán.
Seyyed Ebrahim Raisi era un destacado estadista, un político sobresaliente y una gran personalidad que se había ganado la confianza del pueblo iraní. Nuestros numerosos encuentros siempre me han dejado una gran impresión. Mi último encuentro con él fue histórico. Tanto él como yo lo calificamos de encuentro histórico. Nuestra participación conjunta en la inauguración de un gran proyecto de infraestructuras en la frontera estatal puso de manifiesto la solidez de las relaciones entre Irán y Azerbaiyán. Fue un mensaje muy claro para nuestros dos pueblos y para el mundo entero de que somos amigos y hermanos, y de que seguiremos estando juntos. Tras la ceremonia inaugural, tanto las declaraciones oficiales del difunto presidente Raisi como las mías tuvieron implicaciones políticas muy serias. Ambos presidentes afirmaron abiertamente que los países situados en la región deberían participar activamente en el futuro desarrollo de esta región.
Esta tragedia, por supuesto, supone un enorme dolor, tanto para sus familiares como para quienes le conocían. Pero lo que nos consuela es que dedicó su vida al desarrollo del pueblo iraní. Desempeñó un papel especial en la defensa de los intereses nacionales del Estado iraní. Tanto durante su mandato como presidente como en los periodos anteriores, trató de mejorar el bienestar del pueblo iraní y desempeñó un papel importante en la protección de los intereses nacionales.
Como saben, estuvimos juntos durante más de dos horas justo antes de que ocurriera esta tragedia. Durante la reunión bilateral, que duró más de una hora, se discutieron muchos temas importantes. Se reafirmaron las futuras direcciones del desarrollo de las relaciones Irán-Azerbaiyán y se demostró una vez más la firme voluntad política de ambas partes. Al mismo tiempo, mantuvimos un amplio intercambio de opiniones sobre proyectos concretos de infraestructuras y tomamos decisiones importantes. Confío en que quienes participaron en esa reunión transmitirán esto a los nuevos dirigentes de Irán. Estoy seguro de que todos los acuerdos alcanzados se llevarán a la práctica porque se basan en los intereses de los pueblos de Irán y Azerbaiyán. Expresamos nuestra firme determinación durante la conversación con el difunto presidente Raisi de que a partir de ahora habría un número significativo de grandes proyectos, tanto bilaterales como multilaterales.
Por desgracia, no tuvo la suerte de ver la ejecución de los proyectos futuros. Todo el mundo tiene que aceptar el destino. Sin embargo, permítanme decir de nuevo, el factor reconfortante es que sacrificó su vida por el desarrollo de Irán, y en nuestra memoria, en la memoria del pueblo de Irán y del pueblo de Azerbaiyán, permanecerá como una personalidad brillante, un gran estadista, y un gran amigo del Estado y del pueblo de Azerbaiyán. Le ruego acepte de nuevo mis condolencias. Que Alá haga descansar su alma en paz.
Seyyed Jafar Aghaee expresó su gratitud al presidente de Azerbaiyán por visitar la Embajada y ofrecer sus condolencias.
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